Cancerino (a)

La cancerina (Hippocratea excelsa) es una planta leñosa silvestre de la selva baja caducifolia, ampliamente demandada por su uso medicinal. La corteza de sus tallos y raíces es reconocida como tratamiento eficaz para la gastritis, cáncer, desinfectante de heridas e infecciones diversas, entre   otros padecimientos.

Propiedades: Para el dolor de garganta e inflamación de las amígdalas (amigdalitis) y para curar llagas y heridas.

Modo de Empleo: Para la amigdalitis, hervir en un cuarto de litro de agua, 10 gramos de cancerino; posteriormente, se cuela y con esta decocción se llena un vaso en sus tres cuartas partes, se le agrega una cucharada de agua oxigenada y una cucharada de alcohol y con esto, se hacen gárgaras antes de acostarse durante 2 a 3 días, procurando no ingerir el líquido, ni tomar nada frío. Este tratamiento es únicamente para jóvenes y adultos, debido a que un menor podría pasarse el fluido. Para curar llagas y heridas, se toman unas ramitas de cancerino, se sacude y el polvo que se desprende, se guarda, luego se hierve la hierba en medio litro de agua y con este cocimiento, se lava perfectamente la herida, se seca con un algodón, se pone el polvo y se venda con una gasa. Este procedimiento se deberá llevar a cabo diariamente hasta la cicatrización total. Se recomienda no tomar alcohol, café ni picante ni comer carne de puerco.